Prada (2007), define de la siguiente manera el concepto de sí:
El proceso dinámico cognitivo-afectivo de diferenciación, integración, organización y consolidación del ser humano en contacto con los otros y con el mundo, a través del cual aquél expresa su individualidad y unicidad personal, lo que siente, piensa y actúa, y lo que quiere llegar a ser (p. 165).
Entonces, ¿cuál es la diferencia entre el concepto de sí mismo y la autoestima?
Para responder a esto, se hace necesario considerar que el concepto de sí es un conjunto de ideas y creencias que conforman una imagen mental de la persona. Es decir, corresponde a un entramado de información cognitiva que es expresada positiva o negativamente de la siguiente manera: “Soy negativo”, “No sirvo para nada”, “Soy inteligente”, “Estoy deprimido”, entre otras muchas expresiones que suelen manifestarse. Mientras que la valoración personal o autoestima hace referencia a emociones, sentimientos, acciones y conductas.
En conclusión, hay que decir que el concepto de sí mismo está conformado por las distintas ideas, creencias y actitudes que tiene cada persona respecto de sí misma, organizando mentalmente una serie de representaciones que pueden convertirse en imágenes, conceptos, pensamientos y juicios. Dicho concepto influye de manera significativa en el comportamiento, debido a que hace parte del núcleo de la personalidad que se configura desde la infancia en interacción con la familia, instituciones y sociedad.
(Tomado del libro Creciendo en la Valoración Personal, de la página 39)
